La industria eólica desempeña un rol crucial en los objetivos contra la crisis climática. Desde la CEA nos unimos a la campaña WIND. ARE YOU IN? liderada por Global Wind Energy Council (GWEC) para concientizar sobre la urgencia de seguir instalando fuentes de energía limpia para limitar el calentamiento global según lo establecido en el Acuerdo de París, y en miras hacia la COP26 que tendrá lugar en noviembre de 2021.
El pasado 15 de junio, Día Mundial del Viento, diferentes empresas y asociaciones del sector conformaron la Coalición Global del Viento para presentar propuestas concretas en la COP26, que se llevará a cabo en Glasgow a fin de año. En este marco, la coalición aseguró que los países de todo el mundo deben aumentar urgentemente el despliegue de energía eólica para abordar la emergencia climática.
El Acuerdo de París, adoptado por 196 protagonistas en el año 2015, instó a las naciones a tomar medidas para limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados en comparación con los niveles preindustriales y, aunque ha habido progreso en la última década, hace falta una mayor determinación y urgencia para lograr el objetivo Net Zero (de emisiones netas cero de carbono) para el año 2050.
Para alcanzar este objetivo, según los informes publicados recientemente por la Agencia Internacional de Energía (AIE) y la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA), el mundo necesita instalar energía eólica a un ritmo 3 o 4 veces mayor al de lo instalado en 2020, donde se logró un récord de 93 GW. Es por esto que el sector eólico está intensificando su llamado a la acción climática siendo que la instalación de energía limpia es indispensable para frenar el calentamiento global. La energía eólica en particular tiene el mayor potencial de descarbonización entre todas las energías renovables.
El aporte de la industria eólica
Hoy en día hay casi 750 GW de capacidad eólica instalada a nivel global, que ayuda a evitar ya 1.100 millones de toneladas de emisiones de carbono, equivalente a las emisiones de carbono anuales de toda Latinoamérica. Este despliegue sin precedentes de la energía eólica mundial ha sido impulsado por un círculo virtuoso de innovación, reducción de costos y creación de empleo a grandes escalas.
El interés mundial en la industria quedó demostrado en el año 2020 en el cual, a pesar de los impactos económicos globales del COVID-19, la industria eólica obtuvo una inversión de 142 mil millones de dólares. Este inmenso crecimiento resulta de que la energía eólica ha demostrado ser una fuente de energía confiable, asequible y un motor sostenible para el crecimiento económico global.
¿Cómo seguimos?
La campaña WIND. ARE YOU IN? impulsada por GWEC y apoyada por CEA, insta a los gobiernos, a las empresas y los ciudadanos a sumarse a la acción climática a través del apoyo a una industria que se ha expandido significativamente en las últimas décadas y que es generadora de energía limpia y competitiva en costos, lista para protagonizar el cambio hacia los objetivos de emisiones cero netas de carbono. La inversión mundial en energía eólica es beneficiosa para crear nuevos puestos de trabajo y oportunidades en el presente, a la vez que se construyen infraestructuras y economías más resistentes para el futuro.
Desde Noticias CEA conversamos con Ramón Fiestas, Presidente de GWEC Latinoamérica, sobre la importancia de la industria eólica en la lucha contra la crisis climática:
¿Por qué es tan importante la COP26? ¿Qué definiciones se tomarán allí?
A la cumbre asistirán los jefes de Estado de los países firmantes de la Convención UNFCCC, así como diversos expertos y activistas del clima, con el fin de acordar y acelerar la acción del Acuerdo de París para limitar el incremento del calentamiento global del planeta por debajo de 1,5ºC en 2050. Será la primera conferencia en la que se evaluará el grado de cumplimiento del primer ciclo de cinco años de los objetivos iniciales de emisiones previsto en el Acuerdo, y se establecerán nuevos objetivos para el próximo ciclo de cinco años, lo que resulta de importancia capital para la concreción de acciones políticas imprescindibles sobre los sectores implicados en la descarbonización ya en la presente década. En la actualidad el mundo cuenta con soluciones tecnológicas suficientemente desarrolladas para asegurar la neutralidad de emisiones de CO2 en el horizonte de largo plazo previsto en el Acuerdo, si bien su implantación requiere de la adopción de las políticas adecuadas, y ha llegado el momento de adoptarlas sin demora para asegurar un futuro viable a las generaciones venideras.
¿Cómo propone la industria eólica colaborar con los compromisos internacionales para evitar la crisis climática?
Las recientes hojas de ruta hacia la neutralidad de emisiones publicadas por la AIE e IRENA atribuyen el mayor despliegue de esfuerzos al sector de la energía eólica al estimar que será la principal fuente de generación de electricidad a nivel mundial en el año 2050 y, conjuntamente con la energía solar fotovoltaica, desempeña un rol fundamental en la descarbonización del sistema energético. La transición energética en el sector de la generación de electricidad se apalanca sobre las nuevas tecnologías de energías renovables, y de entre ellas de forma masiva sobre la eólica terrestre y marina, con recursos energéticos casi ilimitados disponibles en todas las regiones del mundo y creciente competitividad en términos de costes y su rápida escalabilidad utilizando la tecnología existente.
De persistir el ritmo actual de crecimiento de la capacidad eólica instalada el objetivo de la neutralidad de carbono en 2050 se quedará en un 55%. Para asegurar el éxito de nuestros objetivos climáticos colectivos, el despliegue anual de energía eólica instalada en esta década debe cuadruplicarse con respecto a los 93 GW instalados el año pasado.
¿Por qué la alternativa eólica es la mejor opción entre las EERR?
El Fondo Monetario Internacional estima que las medidas puestas en marcha para una recuperación sostenible podrían impulsar el PIB mundial un 3,5% en 2023 por encima de los niveles habituales. Entre las energías renovables es la que provee mayores retornos socioeconómicos.Invertir en energía eólica es un beneficio para crear nuevos puestos de trabajo locales y oportunidades de inversión hoy, mientras se construyen infraestructuras y economías más resistentes para el futuro.
La energía eólica se sustenta en una industria clave para impulsar la actividad económica y permite a los gobiernos renovar infraestructuras críticas y generar proyectos de energía limpia a gran escala para un futuro sostenible facilitando la recuperación económica de la crisis de COVID-19 e impulsando el crecimiento económico. Las acciones de recuperación ecológica que aceleran el despliegue de proyectos de energía eólica pueden desbloquear puestos de trabajo en los segmentos de transporte, instalación y puesta en marcha.Los 470 GW adicionales de capacidad eólica previstos hasta 2025 podrían crear más de 3,3 millones de empleos directos en una dinámica cadena de suministro en todo el mundo.
En el horizonte de los objetivos del Acuerdo de París, el despliegue de 6 TW de energía eólica para 2050 mitigaría 6,3 gigatoneladas de emisiones de CO2 al año y adicionalmente generaría un enorme ahorro de costes en sanidad, infraestructuras, bienestar social y resiliencia del sistema.
La energía eólica marina, en particular, ofrece una respuesta a las perturbaciones del mercado laboral derivadas de la transición energética, facilitando la recolocación de los puestos de trabajo de los trabajadores del petróleo y el gas en alta mar y de la ingeniería marina.
Además, la inversión en energías renovables crea más puestos de trabajo que la inversión equivalente en combustibles fósiles. Cuando los responsables políticos consideren la mejor "relación calidad-precio" en sus paquetes de estímulo económico, deberían reconocer los beneficios socioeconómicos y la creación de valor derivados de la expansión de la industria eólica mundial.
Invitamos a las empresas, organizaciones e individuos a tomar conciencia de todo lo que se puede hacer desde el sector para lograr los objetivos planteados por las naciones y organismos para frenar el calentamiento global. Para más información recomendamos la lectura del reporte de GWEC 2021 y el seguimiento de la campaña a través de las redes sociales de CEA.